Descartó hablar sobre las posibilidades que tiene ahora el exgobernador para desembarcar en su gabinete. Lo compara con el caso de Salmerón.
Para Andrés Manuel López Obrador, relacionar el asesinato de Lourdes Maldonado con Jaime Bonilla, se trata de «politiquería», en tanto que este miércoles también evitó hablar sobre el futuro político del ex gobernador de Baja California. «¿Para qué hablar de eso?», cuestionó.
Visiblemente molesto ante el cuestionamiento, el Presidente aseguró durante su conferencia matutina de miércoles que ya se inició la investigación a fondo y prometió dar informes periódicos en tanto no se afecte la investigación.
«Yo quisiera decir que no hay impunidad, pero que, al mismo tiempo, no hagamos politiquería en un asunto tan serio. Todos van a ser investigados, los que considere la autoridad. No hay impunidad y no adelantarnos. No hacer juicios sumarios. Ya no es el tiempo de antes. Ahora la Secretaria de Seguridad es Rosa Icela Rodríguez, no García Luna», afirmó.
El asesinato de Maldonado, en la ciudad fronteriza baja californiana, ocurrió en medio de un litigio que mantenía con la empresa Primer Sistema de Noticias (PSN), propiedad de Bonilla Valdez, mismo por lo cual, tres años atrás la periodista solicitó apoyo al gobierno federal y aseguró que temía por su vida.
El caso se suma a otros asesinatos a periodistas, no solo en Tijuana sino en otras entidades de la república, durante este gobierno y otras administraciones, lo que ha generado una fuerte indignación en el gremio, expresado la noche de ayer en una manifestación a las afueras de la Secretaría de Gobernación, cuestionando duramente el apoyo que el gobierno asegura ofreció en este caso en particular. Aunque el Presidente aseguró ayer que Maldonado nunca pidió protección federal, sino estatal.
En lo que se refiere a la posibilidad de que Bonilla forme parte de su equipo, López Obrador fue enfático este día en que «ese es otro asunto». A recordar: el ex gobernador ya se preparaba para asumir un puesto en alguna subsecretaria de la misma Segob, sin embargo, en su entorno ya se habla de que esto podría no ocurrir.
Como explicó LPO, fuentes al interior del Senado, explicaron que Bonilla envió una señal inequívoca para reincorporarse a su escaño, con lo que gozaría con la protección de un fuero, en caso de alguna acción penal.
En ese sentido, López Obrador agregó al cuestionamiento de una reportera sobre el destino de Bonilla Valdez: «¿Por qué ahora hablar de eso?» y además, aprovechó para comprarlo con el caso del historiador Pedro Salmerón, envuelto también en la polémica por las acusaciones de acoso sexual.
Al respecto también dejó en claro que no va a reconsiderar su propuesta para que sea el embajador de Panamá. «Nosotros consideramos que (Salmerón) es una persona capaz, ya lo dije la vez pasada. Es uno de los mejores historiadores de este país».
«Yo no estoy dispuesto a ceder en esas cosas. Ahora, si hay un juicio, si hay pruebas y está en el Ministerio Público, está en el juez, está acusado, pues cómo lo vamos a defender, de ninguna manera», dijo.
Aunque insistió que se trata de una campaña mediática y de linchamiento mediático. «¿Qué no se ponen a ver el daño que provocan no solo a él sino a sus familiares? ¿Qué no debe a ver cierto respeto?», cuestionó.
