Las dirigencias nacionales del PAN y PRD hicieron un llamado para que su hasta ahora aliado retire la iniciativa que permitiría las Fuerzas Armadas participar en tareas de seguridad hasta 2028
Las dirigencias de los partidos Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD), encabezadas por Marko Cortés y Jesús Zambrano, respectivamente, llamaron al Revolucionario Institucional (PRI) a recapacitar su postura sobre la permanencia de las Fuerzas Armadas hasta el 2028 en actividades de seguridad pública.
En un comunicado, ambas instituciones mencionaron que deben permanecer como opositores, incluyendo al PRI, para que no se militarice el país y exigir de manera conjunta al gobierno que corrija la fallida estrategia gubernamental de seguridad cuando concluya el plazo –en marzo de 2024– para la permanencia del Ejército en las calles, como marca hasta ahora el 5º Transitorio Constitucional.
También, exigir y vigilar que en el plazo constitucional restante se dé forma –desde la cabeza, hasta sus integrantes– a una Guardia Nacional civil como mandata la Carta Magna.
La primera responsable en tareas de seguridad, señalan, debe ser la Guardia Nacional y las Fuerzas Armadas participar sólo de manera complementaria y extraordinaria.
Tanto Marko Cortés como Jesús Zambrano sostienen que los tres partidos (PAN, PRI y PRD) tienen que trabajar de manera conjunta para que la Guardia Nacional se transforme y consolide como una policía nacional civil, y solo entonces poder valorar la pertinencia de ampliar o no el plazo constitucional.
«Hacemos un nuevo y respetuoso llamado a los legisladores del PRI a efecto de que retiren su propuesta de reforma al 5o transitorio constitucional o, en su caso, votar en contra de la propuesta de reforma constitucional al 5o transitorio, con lo cual daríamos tiempo para construir como Coalición una propuesta responsable», reza el comunicado.
Piden inmediato trabajar los tres juntos por la seguridad del país y hacer una propuesta real, construida de la mano con la sociedad civil y por la coalición Va Por México, asumiendo la práctica del parlamento abierto, para que se conozcan las preocupaciones de la academia, de expertos en la materia y tener diagnósticos objetivos sobre la situación del sistema de seguridad pública del país.
Recordaron que hace tres años y medio se constituyó la Guardia Nacional, la cual se hizo para que el país contara con una policía nacional civil, dirigida y compuesta por personal de carácter civil y para combatir la inseguridad, así quedó establecido en la Constitución, aunque en los hechos, esto no ha sido una realidad, ya que desde su creación y hasta la fecha ha estado bajo mandos militares y la integran en un 80 por ciento personal proveniente de las fuerzas armadas.
Los incrementos en los índices de violencia e inseguridad en estos tres años y medio evidencian que la estrategia gubernamental de seguridad y de combate a la delincuencia ha fracasado rotundamente.
Además, advirtieron que con la creación de la Guardia Nacional se estableció en el artículo transitorio 5o de la Constitución, publicado el 26 de marzo de 2019, que “durante los cinco años siguientes a la entrada en vigor del presente decreto en tanto la Guardia Nacional desarrolla su estructura, capacidades e implantación territorial, el presidente de la República podrá disponer de la fuerza armada permanente en tareas de seguridad pública de manera extraordinaria, regulada, fiscalizada, subordinada y complementaria”.
Por lo tanto, el plazo para que esta disposición establecida en el 5o transitorio constitucional venza es en marzo de 2024; es decir, todavía falta un año y medio, por lo que no existe ningún tipo de urgencia para que se discuta la iniciativa priista.
La prórroga que plantean el PRI, no solamente extiende la actuación inconstitucional de la Guardia Nacional y de las Fuerzas Armadas, también valida y amplía por cuatro años más, la equivocada y fallida estrategia de seguridad que el gobierno ha trazado y esto potencia por más del doble, dado que serían 4 años más, los desastrosos resultados que hoy se tienen y no hay duda que se pueden anticipar las terribles cifras de homicidios violentos y desapariciones.
A diferencia de lo que prometió en campaña y no cumplió López Obrador, “ni el PAN ni el PRD estamos pidiendo que regresen los militares a los cuarteles. Lo que estamos pidiendo es que se corrija la fallida estrategia de seguridad que ha incrementado los niveles de violencia e inseguridad y que, como cualquier país democrático en el mundo, México tenga una Policía Nacional civil, bien pagada, equipada y organizada”.