AMLO habló sobre el caso de Aguililla y reprochó las críticas: «No soy Peña Nieto ni Calderón, no soy partidario de matar en caliente».
En el contexto del recrudecimiento de la violencia a manos del narcotráfico en Aguililla, Michoacán, el Presidente López Obrador fue enfático en que no dará marcha atrás a su estrategia de poner al frente al Ejército y a la Guardia Nacional, pero no en una respuesta violenta, abogando por el diálogo.
En ese tenor, expresó este martes, en su conferencia de Palacio Nacional.
«No estoy de acuerdo con la vía violenta. Y aunque se burlen, porque tengo una razón de fondo, voy a seguir diciendo que abrazos, no balazos». Insistió en que «no se puede apagar el fuego con el fuego y su apuesta es por el diálogo, por lo que anunció que abrió una mesa para este fin en la región.
De esa manera, López Obrador fijó su postura ante la presencia del narco, que tomó dicha región desde abril y por lo cual se desplegó elementos de la Guardia Nacional y del Ejército.
No obstante, la situación de violencia ha escalado y mantiene en alta tensión a su población por los choques entre el cártel Jalisco Nueva Generación y los cuerpos de seguridad, además de que la población ha sufrido apagones y de incomunicación debido a las acciones de este grupo criminal que ha cortado los accesos carreteros, así como cortes de energía, de acuerdo con las denuncias de la población.
Este escenario a provocado ya reclamos al Gobierno Federal sobre su estrategia.
Pese a estos reclamos, el Presidente es enfático en no dar marcha atrás e hizo un llamado a la población para ayudar a pacificar la región.
«Que no se tome el camino de la violencia, de la confrontación, que hagamos a un lado el odio, el rencor, que llevemos a la práctica el principio del amor al prójimo, que no nos hagamos daño. No a la violencia, si a la paz, al diálogo», lanzó.
Y en esa línea explicó que no quiere pérdidas humanas, de ningún sector.
También pidió a la población no dejarse «manipular» por este grupo criminal.
«Aunque aparentan ser muy buenos y les reparten despensas, o les ayudan, solo los están utilizando.
Nosotros estamos en la mejor disposición de ayudarlos a toda la población, pero que no opten, que no decidan por querer resolver las cosas con violencia. Se los pide el Presidente de México.
Afirmó que no dejará sin protección a la población, por lo que advirtió que continuará el Ejército y la Guardia Nacional, «porque si no, se convierte en terreno de nadie o de quien se impone mediante la violencia y somete.
El estado tiene como función garantizar la paz y tranquilidad. No les vamos a dejar a los grupos de autodefensa. Eso no. Eso fue un grave error.
Eso ya no se acepta y estamos buscando el diálogo», dijo.
Y es que recalcó que esta estrategia es lo que lo diferencia de las tomadas en sexenios pasados. «Yo no soy Peña ni Felipe Calderón, no soy partidario del mátalos en caliente.
No soy partidario de masacres, de torturas, de la asociación delictuosa que se daba entre delincuencia y autoridades. Somos distintos. Vivimos asediados porque es una temporada de canallas, temporada de zopilotes de quienes quisieran que fracasáramos, pero no», agregó.
