México vive la tercera ola de la pandemia de COVID-19 con cierto desparpajo de un sector escéptico la población, que relaja las medidas preventivas, mientras las autoridades intensifican la campaña nacional de vacunación, y algunas familias desconfían de la pertinencia de volver a clases presenciales el 30 de agosto.
Entre las autoridades sanitarias se destaca el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), que lanzó una «campaña preventiva a nivel nacional» con la finalidad de promover la inmunización masiva contra el COVID-19.
El objetivo es «reforzar los cuidados en las personas que ya se vacunaron, hacerlos corresponsables en el cuidado de la salud, así como ser solidarios con quienes están en espera de ser vacunados», dijo el doctor Manuel Cervantes Ocampo, coordinador de Unidades de Primer Nivel del IMSS.
Sumado al hartazgo por el encierro, la vacunación -que ya alcanza el 63% de la población adulta- propicia que algunos sectores bajen la guardia, descuiden el uso de mascarillas o dejen de utilizarla, como se puede observar en las calles de la capital y grandes ciudades.
Campaña de orientación
La campaña preventiva de la institución fundada en 1943, unas de las más antiguas del sistema de salud mexicano, tiene como base los Programas Integrados de Salud, llamado PrevenIMSS.
«Los mensajes PrevenIMSS están dirigidos a derechohabientes, trabajadores y población en general para reducir cadenas de contagio por COVID-19 y fomentar hábitos saludables».
La institución de seguridad social también orienta a los afiliados que padecen morbilidades -como la obesidad, la diabetes, y la hipertensión, entre otras- sobre cómo identificar los síntomas graves en caso de contraer la enfermedad infecciosa y que conozcan los servicios médicos que brinda.
«El IMSS es la institución más grande en México que otorga seguridad social a trabajadores, estudiantes y toda aquella persona afiliada, y trabaja en conjunto con las diferentes instituciones de salud del Gobierno de México para cumplir el objetivo de vacunar a personas de 18 años o más en todo el país a la velocidad que el arribo de vacunas nos lo permite», explica el especialista.
Las autoridades sanitarias han recibido casi 94 millones de dosis de diversos biológicos, y se han aplicado 81,2 millones de vacunas en ruta hacia inmunizar al toda la población adulta en octubre próximo, antes del invierno boreal.
El total de personas vacunadas suma 56,6 millones, de ellas, 55% ya recibieron el esquema completo de vacunación de una o dos dosis, dependiendo del fármaco aplicado, con un avance rápido en la vacunación de la población en edades de 18 a 39 años.
El doctor Cervantes explica que «la vacunación ha avanzado de buena manera en gran parte de las entidades, algunos estados enfrentan retos logísticos, principalmente por la geografía y las características sociales de la población, sin embargo, se continúa avanzando en todo el país».
«Uno de los mensajes más importantes que enviamos a la población de forma continua y por todos los medios de comunicación disponibles es que, si no se han vacunado, acudan a vacunarse en cuanto sean convocados o bien; las vacunas son seguras y eficaces para prevenir las formas graves de la enfermedad, así como la muerte por COVID-19», indica el coordinador de Unidades de Primer Nivel del IMSS .
De igual manera, las autoridades sanitarias piden a la población en general mantener las medidas sanitarias que han demostrado eficacia: el lavado de manos, uso de cubrebocas y el distanciamiento físico.
«Estas medidas se deben mantener a pesar de que ya estén vacunados, y el objetivo de realizar estas sencillas acciones es disminuir los contagios y proteger a aquellos que son más vulnerables», puntualiza.
En ese clima, unos 30 millones de escolares volverán a llenar de vida a las aulas que permanecieron vacías casi año y medio.