Deslizó que se trata de una estrategia mercantil. López-Gatell dijo que no existen estudios científicos. Continúa el plan escolar.
Luego de que la farmacéutica Cansino avisó que era necesaria una segunda dosis de su vacuna contra Covid-19, el gobierno mexicano replicó que no existe evidencia científica suficiente para comprobar que esta afirmación sea cierta, por lo que de momento descartó considerar una segunda aplicación de este biológico con el que se inmunizó principalmente al personal educativo.
El debate desde Palacio Nacional es que el informe de la empresa de Beijín responde más bien a intereses mercantiles: «Las farmacéuticas quieren que se consuman más vacunas y nosotros tenemos que tener las vacunas necesarias y definir una política de protección a la gente, no una política mercantil o comercial», dijo al respecto el Presidente López Obrador, al ser cuestionado este martes en su conferencia matutina.
«Cada quien tiene su función. Las farmacéuticas están en su papel, pero el gobierno también tiene que cuidar el presupuesto, que es dinero de todos. No se puede desperdiciar y se tiene que actuar a partir de fundamentos científicos, no de declaraciones, o de boletines», declaró.
La postura fue respaldada por el subsecretario Hugo López-Gatell, quien profundizó más en el tema, agregando que «no existe, al día de hoy, evidencia científica robusta que demuestre que ninguna de las vacunas pierde su capacidad protectora contra los desenlaces que interesa evitar: muerte, hospitalización grave u otras complicaciones».
Sin embargo, afirmó que los encargados de Salud continuarán monitoreando las nuevas evidencias científicas y no se trata de una decisión inflexible: «Si apareciera evidencia científica, clara, robusta que mostrara que se redujera la potencia protectora de las vacunas, podría llevar a otra decisión, pero hasta ahora no se ha ocurrido», aclaró.
En la misma línea del Presidente, indicó: «Hasta este momento no hay evidencia robusta que convenza que se necesita eso. Pero lo que sí vemos es una gran cantidad de información que viene de las secciones de mercadotecnia de las casas farmacéuticas o de sus gerentes que sugieren que se necesita eso como si fuera algo demostrado científicamente».
Agregó que la propia representación de la empresa en México indicó que presentaría un expediente técnico para solicitar un cambio en el registro sanitario sobre la segunda dosis, sin embargó, indicó que hasta este momento no lo han presentado.
«Hay que salir y enfrentar la realidad»
El tema genera mucho revuelo en medio de los planes de regresar a clases presenciales, ya que se trata del fármaco aplicado en el personal docente, lo que suma al debate sobre si existen las condiciones para que este plan se concrete el próximo 31 de agosto.
En ese aspecto, esta mañana el subsecretario de salud también previó que en 15 decías se empezará a ver «el declive de la terrera ola». También descartó que sea un riesgo latente para menores de edad, pues indicó que el 1.6% de los hospitalizados son menores a 18 años y el porcentaje es todavía menor en menores de 12 años y en algunos casos se relaciona no solo con Covid, sino por otros padecimientos que se conjuntan, como leucemia.
Pro su parte, López Obrador insistió en que debe continuar el plan de regresar a clases, si bien enfatiza que no es obligatorio: «Se tiene que llevar a los niños y se tiene que correr riesgos. No nos podemos quedar encerrados por temor a un mal aire, nos da pulmonía y mejor no salimos. Vamos a salir y enfrentar la realidad y confiar que nos va a ir bien porque la suerte también juega en esto», dijo.
Además, se deslindó de la carta presentada apenas una semana atrás por parte de Delfina Gómez, como parte del decálogo de la SEP para el regreso a clases. Afirmó que no será obligatoria y que él no tuvo nada que ver con la misma. Dijo que esa propuesta de la carta responde a una «visión autoritaria, desde abajo»