La muerte de Diego Armando Maradona ha cimbrado al mundo entero; a la edad de 60 años, el mejor conocido como, ‘D10S’ deja un legado imborrable en la historia del futbol. Curiosamente, el “revolucionario” del futbol ha muerto el mismo día, que el emblemático Fidel Castro
La muerte de Diego Armando Maradona ha cimbrado al mundo entero; a la edad de 60 años, el mejor conocido como, ‘D10S’, ‘Diegol’, ‘Barrilete Cósmico’ deja un legado imborrable en la historia del futbol. Curiosamente, el “revolucionario” del futbol ha muerto el mismo día, que otra emblemática figura mundial, el revolucionario, Fidel Castro, su amigo entrañable, a quien consideraba su segundo padre.
Sin duda alguna, las historias de Fidel Castro y Diego se entrelazan por un mismo ideal; la revolución, uno en el futbol y el otro en la política. Ambos personajes se conocieron en 1987, a partir de la fecha mencionada, su amistad perduró hasta la muerte del mandatario cubano en el 2016.
Cabe recordar, que el ‘Diego’ sentía una gran admiración por la revolución cubana, en especial por Ernesto ‘Che’ Guevara, que por cierto se tatuó su rostro en el brazo y la pierna izquierda, a Fidel Castro.
La estrecha relación entre Diego y Fidel continuó y fue en el año 2000, cuando Maradona visitó territorio cubano para someterse a un tratamiento contra su adicción a las drogas; de hecho fue Fidel Castro quien ayudó al ‘Diego’ a desintoxicarse.
Para Fidel Castro, Maradona, no sólo representaba el “mejor futbolista de la historia”, sino una voz autorizada para defender los ideales de la revolución.
En uno de los tantos encuentros entre Fidel y Maradona, existe una histórica entrevista, donde el argentino confiesa un enorme respeto hacia el mandatario y sus palabras fueron “Fidel, si algo he aprendido contigo a lo largo de años de sincera y hermosa amistad, es que la lealtad no tiene precio”.
Hace exactamente cuatro años Fidel falleció y cuando el campeón del mundo se enteró de la noticia de su gran amigo, le afectó hasta llegar a las lágrimas diciendo “Viví cuatro años en Cuba y Fidel me llamaba a las dos de la mañana para hablar de política, o de deporte, o de lo que se diera en el mundo, y yo estaba dispuesto para hablar. Este es el recuerdo más lindo que me queda.
De hecho, Diego Armando viajó a la ciudad de La Habana para despedirse de su entrañable amigo y estar apoyando moralmente a la familia del mandatario cubano.
Hoy, 25 de noviembre, exactamente cuatro años después de la muerte de Fidel, Diego Armando sigue sus pasos, tras un paro cardio respiratorio, dejando un legado memorable en todo el mundo.
Descansa en paz, Diego Armando Maradona.
