El presidente afirmó que el proyecto Agua Saludable para La Laguna es de los más nobles que puede haber porque será para beneficio de todo el pueblo y pidió la ayuda de la población para que ya no quitar los amparos contra la obra.
El Poder Judicial está podrido, hay honrosas excepciones, para no generalizar, pero jueces, magistrados, ministros, están al servicio de los grupos de intereses creados y tienen una mentalidad ultraconservadora, atajó el presidente Andrés Manuel López Obrador, al hablar sobre los amparos que hay por el proyecto Agua Saludable para La Laguna.
“Si tuviésemos un Poder Judicial confiable, yo diría: “no hay problema, vamos al litigio, vamos a demostrar que no hay afectaciones”, pero no. Nos metemos en eso, nos entrampamos, nos presentan una denuncia y luego otra, y otra y otra y se nos va el tiempo, y es una táctica dilatoria y no se hace la obra, ya hay hasta licitaciones en este caso”, agregó de gira por Coahuila, en donde pidió la ayuda de la población para que esta obra no se vea interrumpida y quede inconclusa al término de su sexenio.
El primer mandatario afirmó que el proyecto es de los más nobles que puede haber porque será para beneficio de todo el pueblo. Asimismo, aseveró que no afectará al medio ambiente ni tampoco dejará sin agua a los productores. Incluso, refirió que se les va a respetar su dotación y se va a invertir para tecnificar las tierras de riego. También adelantó que se reparará todo el sistema de conducción de líneas de agua en los nueve municipios para evitar fugas y aprovechar mejor el agua.
“Entiendo que en otros tiempos o en otras circunstancias había la desconfianza de que unos acaparaban el agua y dejaban sin agua a la gente, que sólo los influyentes podían tener agua y acapararla. Eso ya no sucede, ya no son esos tiempos, ya no es el tiempo en que el gobierno estaba secuestrado, tomado al servicio de minorías; ahora el gobierno que represento es un gobierno del pueblo y para el pueblo, mi único amo es el pueblo”, refirió.
“No soy un sirviente de potentados, soy presidente de México, represento a todos, a ricos y a pobres y tengo como encomienda no permitir injusticias, luchar siempre por la igualdad. Les digo esto porque vamos a cuidar de que no haya privilegios en el uso del agua, vamos a cuidar que no haya huachicol con el agua, voy a estar pendiente y vamos a evitar esos abusos”.
López Obrador comentó que el director general de la Comisión Nacional del Agua, Germán Arturo Martínez Santoyo, fue quien le informó sobre los amparos que pararon la obra.
“Me preocupó mucho y dije: “no, tengo que ir a ver de qué se trata y hablar con la gente”. No quiero que a los nuevos gobernantes les pase lo que a nosotros nos sucedió, que recibimos cientos de obras en proceso, inconclusas, que estamos terminando y que hay algunas que de plano no las vamos a poder continuar. Hospitales que hicieron en barrancas, que estando todavía en obra negra ya se partieron, entonces, ¿cómo vamos a continuar con esas obras?”, expuso.
“Yo no quiero que esta obra la iniciemos y quede inconclusa y que además derrochemos presupuesto, que es dinero del pueblo, pero también eso es otra cosa que tenemos que ir asimilando, internalizando. El presupuesto no es dinero de los funcionarios, es dinero del pueblo, no es dinero del gobierno, es dinero de todos”.
Por lo anterior, el jefe del Ejecutivo pidió la ayuda de la población y propuso que la decisión final sea entre todos.
“Es más honesto decir: “no se va a poder”; y utilizamos los recursos para otras necesidades, y no meternos en algo que nos vaya a afectar, no caer en una trampa, porque hay gente que está dedicada a la politiquería. Ya no estamos para eso. Que podamos llegar a un acuerdo entre todos de que vamos a ayudar, convencer a quienes han presentado estos amparos que los retiren; si no los retiran, no se va a hacer la obra, así de claro”, indicó.
“Les propongo que nos demos un tiempo, que los gobernadores de Durango, de Coahuila nos ayuden con Germán, con los presidentes municipales, los de las asociaciones de productores, los mismos ambientalistas, todos, que se lleve a cabo un debate ordenado, que se escuche a todos, que se informe bien, y que, después de un plazo razonable, que decidamos entre todos”.
“Y les propongo que, para finales de septiembre o a principios de octubre, un domingo igual, así, como estamos, ya que participen todos, se organicen y cada uno tome la palabra de acuerdo a lo que se resolvió y ya decidimos aquí entre todos, si les parece. Sí tendríamos que tener para entonces ya resuelto lo de los amparos porque, si no, no nos alcanza el tiempo y no voy a ser -se los digo con toda la claridad- rehén de nadie. El presidente de México no puede ser rehén de personas o de grupos por poderosos que sean, por influyentes que sean, por combativos que sean. Siempre debe de prevalecer la justicia en todo caso, la justicia y la verdad, que nos va a hacer libres siempre”, añadió.