El gobierno de Nuevo León realizaba hace seis meses hasta 2 mil 300 pruebas diarias para detectar COVID-19.
Hubo personas que se la hicieron más de 10 veces, sin presentar síntomas, y acudían a los centros de atención sólo por curiosidad.
Ahora que se registran cuatro veces la cifra de contagios y cinco la de defunciones que hace medio año, la administración estatal señala que ya no hay recursos para efectuar más pruebas y tendrían que diferir pagos a proveedores, además de pedir apoyo a la Federación.
Durante la última semana, Salud hizo un promedio de 894 test al día, sin alcanzar su propia meta de al menos mil por día, y muy lejos de las 2 mil 300 que hacían hace seis meses.
El 11 de junio pasado, al cumplirse tres meses del inicio de la pandemia, el secretario estatal de Salud, Manuel de la O Cavazos, anunció que en las 24 horas previas se habían reportado 176 contagios del virus Sars-CoV-2 y cinco defunciones, para un total de 4 mil 388 infectados y 169 decesos acumulados, al tiempo que hasta ese momento se habían realizado 45 mil 118 pruebas para detectar la enfermedad.
El jueves, De la O Cavazos informó que, durante la semana 51 de la pandemia se registraron 731 contagios diarios, mientras el promedio de defunciones ascendió a 31 diarios. Hasta el viernes pasado se habían contagiado en la entidad 119 mil 819 personas y habían fallecido 6 mil 358, mientras se habían realizado 329 mil 296 pruebas en total.
